dc.description.abstract | La desafección y descontento ciudadano son síntomas que han afectado el accionar de
las fuerzas políticas e institucionales en general, pero las costarricenses en particular.
Dicha sintomatología es expresada a partir de diversas formas, evidenciadas en el
abstencionismo electoral y los bajos índices de participación ciudadana en la “cosa
pública”; entre otras. Al menos, estos han sido señalados por diversos estudios como
indicadores del descontento ciudadano. Por varios años se ha señalado un persistente malestar con las instituciones
democráticas, fenómeno globalizado, que incide especialmente en el descrédito de los
partidos políticos y de las acciones que a través de ellos se generan. Particularmente
para el caso de Costa Rica, según se analiza a partir de la Auditoría ciudadana sobre la
calidad de la democracia (Proyecto Estado de la Nación 2001); el ciudadano
costarricense posee un alto aprecio por la democracia, no obstante, paradójicamente, se
identifica la existencia de un alto índice de descontento a partir del cual, se considera que
el funcionamiento de la democracia no facilita el mejoramiento de la sociedad.
Paralelamente, siendo la democracia costarricense caracterizada como una de las más
longevas de América Latina, ante algunas señales de deterioro del sistema político,
emerge necesariamente el cuestionamiento de ¿por qué crece el descontento ciudadano
con sus instituciones y políticos en una democracia consolidada como lo es la
costarricense?
Ante tal realidad que plantea grandes desafíos a nivel país, es importante tener claro lo
que se entiende por descontento y sus dimensiones en la literatura comparada. | es_US |