dc.description.abstract | El enfoque de Derechos Humanos relacionado con el desarrollo se ha venido proponiendo y elaborando desde hace muchos años. Entre otras organizaciones, la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (OACDH) basa su trabajo en los estándares internacionales de Derechos Humanos desde 1955. También la Organización Internacional del Trabajo –OIT-, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia –UNICEF, por sus siglas en inglés- y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo –PNUD- utilizan este enfoque.2
Sin embargo, numerosos gobiernos han preferido interpretar los Derechos Humanos de una manera estrecha, refiriéndose principalmente a casos de derechos civiles y políticos. En cambio, el enfoque reciente de Derechos Humanos también destaca los derechos económicos, sociales y culturales.3 La premisa de partida de este enfoque es el reconocimiento explícito de las relaciones de correspondencia y coherencia que deben existir entre los marcos éticos, normativos, institucionales, programáticos y operativos de los Derechos Humanos en su conjunto.
Tradicionalmente se analizó la pobreza en términos de ingresos, dejando a un lado la aparentemente vaga, pero no menos importante, perspectiva de Derechos Humanos. En los años sesenta, sin embargo, nuevos conceptos comenzaron a desafiar esa perspectiva, incluyendo entre otros el enfoque de participación (Robert Chambers) y el enfoque de capacidades (Amartya Sen). Esos enfoques se concentraban en las personas como sujetos del desarrollo4 y esos cambios conceptuales centrados en las necesidades de las personas comenzaron a tener cierta incidencia en materia de políticas públicas y contribuyeron a desarrollar el enfoque de Derechos Humanos. | es_US |